La ventana de mis ojos

Espacio de una memoria desajustada.


25 enero, 2014

Decálogo para bailar y cantar sin miedo... en circunstancias excepcionales.



"... Todo el que combate una cualidad positiva es un 
impotente.

Querer lo inverosímil es ennoblecerse, querer lo vulgar 
es un envilecimiento premeditado. Amar lo vulgar es 
sumergirse en la oscuridad de la nada, amar lo 
inverosímil es avanzar de cara hacia el sol. El joven que 
se inclina hacia lo vulgar nace viejo. El viejo que se 
inclina hacia lo inverosímil es joven. Lo inverosímil es el 
sueño, lo vulgar es el ronquido. La humanidad ronca. 
Pero el artista está en la obligación de hacerla soñar, o 
no es artista. ..."






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