La ventana de mis ojos

Espacio de una memoria desajustada.


29 junio, 2012

27 junio, 2012

Vlada Mirkovic (Viaje metafísico)

Vlada Mirkovic (About Harmony)

Vlada Mirkovic (Forgers of their Own)

Vlada Mirkovic

Vlada Mirkovic (The Fallen or Scream of the Butterfly)

Vlada Mirkovic (The Alchemist)

Vlada Mirkovic (The Keeper of the Silence)

Vlada Mirkovic (The Rinbow Carcher)

Vlada Mirkovic (Daydreams)

Vlada Mirkovic (The Dreamkeeper)

Vlada Mirkovic (In Searh of Lost Time)

Vlada Mirkovic (The Forbidden Game)

Vlada Mirkovic (Keeper of the Secrets)

Vlada Mirkovic (The Aleph)

Vlada Mirkovic (The Travelling)

Vlada Mirkovic (The Forgers)

Vlada Mirkovic (Metaphysical Journey)

Vlada Mirkovic (Nostalgia for the Infinite)

Vlada Mirkovic (The Aleph)

Vlada Mirkovic (The Gardener)

Vlada Mirkovic  (The Man who Lived His Dreams)

Vlada Mirkovic (The Mystery of Time)

Vlada Mirkovic (Grand Master of the Light)

Vlada Mirkovic (Mysterium Magnum)

Vlada Mirkovic (Byzantine Blue)

Vlada Mirkovic  (Daydreams)

Vlada Mirkovic (Metaphysical Journey)

Vlada Mirkovic (The Cage was Looking for a Bird)









Helicón: ¿El qué?

Calígula: Lo que yo quería.

Helicón: ¿Y que es lo que querías?

Calígula: La luna.

Helicón: ¿Qué?

Calígula: Sí, quería la luna.

Helicón: ¡Ah!... Y, ¿ya está todo resuelto?

Calígula: No, no he podido conseguirla.

Helicón: ¡Que lástima!

Calígula: Sí, por eso estoy tan cansado... Helicón...

Helicón: ¿Sí, Cayo?

Calígula: Piensas que estoy loco.

Helicón: De sobra sabes que yo no pienso nunca. Soy 

demasiado inteligente para pensar.

Calígula: Sí. Pero yo no estoy loco, y aun más: nunca he 

sido tan razonable como ahora. Simplemente sentí en mí, 

de pronto, la necesidad de lo imposible. Las cosas, tal 

como son, no me parecen satisfactorias.



Albert Camus  (Calígula )





       

26 junio, 2012

Bingo (1998) -------- & ... (Ortega y Gasset)







No somos disparados a la existencia como una
bala de fusil cuya trayectoria está absolutamente
determinada. Es falso decir que lo que
nos determina son las circunstancias. Al contrario,
las circunstancias son el dilema ante el
cual tenemos que decidirnos. Pero el que decide
es nuestro carácter.


Nuestras convicciones más arraigadas, más
indubitables, son las más sospechosas. Ellas
constituyen nuestro límite, nuestros confines,
nuestra prisión.


La civilización no dura porque a los hombres
sólo les interesan los resultados de la misma:
los anestésicos, los automóviles, la radio. Pero
nada de lo que da la civilización es el fruto natural
de un árbol endémico. Todo es resultado
de un esfuerzo. Sólo se aguanta una civilización
si muchos aportan su colaboración al esfuerzo.
Si todos prefieren gozar el fruto, la civilización
se hunde.

(José Ortega y Gasset)




24 junio, 2012

Malcolm Sutherland (Umbra)







Ser o no ser, esa es la cuestión:
si es más noble para el alma soportar
las flechas y pedradas de la áspera Fortuna
o armarse contra un mar de adversidades
y darles fin en el encuentro. Morir: dormir,
nada más. Y si durmiendo terminaran
las angustias y los mil ataques naturales
herencia de la carne, sería una conclusión
seriamente deseable. Morir, dormir:
dormir, tal vez soñar. Sí, ese es el estorbo;
pues qué podríamos soñar en nuestro sueño eterno
ya libres del agobio terrenal,
es una consideración que frena el juicio
y da tan larga vida a la desgracia. Pues, ¿quién
soportaría los azotes e injurias de este mundo,
el desmán del tirano, la afrenta del soberbio,
las penas del amor menospreciado,
la tardanza de la ley, la arrogancia del cargo,
los insultos que sufre la paciencia,
pudiendo cerrar cuentas uno mismo
con un simple puñal? ¿Quién lleva esas cargas,
gimiendo y sudando bajo el peso de esta vida,
si no es porque el temor al más allá,
la tierra inexplorada de cuyas fronteras
ningún viajero vuelve, detiene los sentidos
y nos hace soportar los males que tenemos
antes que huir hacia otros que ignoramos?
La conciencia nos vuelve unos cobardes,
el color natural de nuestro ánimo
se mustia con el pálido matiz del pensamiento,
y empresas de gran peso y entidad
por tal motivo se desvían de su curso
y ya no son acción.

William Shakespeare (Hamlet)  











Diamond Dogs (El Agujero Negro)







«Nuestra esencia, aquello que nos definirá, es lo que construiremos nosotros mismos mediante nuestros actos».


Jean-PaulSartre )




23 junio, 2012

Yo soy Betty, la fea






Las únicas acciones que no provocan reacciones contrarias son las que van dirigidas al bien de todos. Son incluyentes, no excluyentes. Unen, no separan. No son para "mí" país, sino para toda la humanidad; no son para "mí" religión, sino para la emergencia de la conciencia en todos los seres humanos; no son para "mí" especie, sino para todos los seres sensitivos y toda la naturaleza.

(Anónimo)






22 junio, 2012

Julio Cortázar (Casi nadie va a sacarlo de sus casillas )


Aleksejj Klim_Samgin Koshelev


























Casi nadie va a sacarlo de sus casillas



El caballo relincha, el perro ladra,

la suma de los ángulos de un triángulo

es igual a dos rectos, la sopa, la conciencia,

el alcaucil, después del dos el tres, después

del hoy, mañana, casi nadie lo sacará de sus

casillas. Casi nadie ni nada, porque ¿cómo tomar

en serio esos latidos en que el sueño es acceso,

esas miradas de insoportable lucidez en un

tranvía, eso que ahora dice: Huye, pero al final, al

fin y al cabo, no era más que un gajo de naranja

reventado en la boca? ¿Cómo tomar en serio que

una puerta dé a la tristeza cuando el arquitecto la

abre al pasillo, que unos senos dibujen paralelos

sus jardines cuando es la hora de

ir a la oficina? Imposible negar las evidencias

dice el doctor y dice bien, inútil sacar de sus

casillas al honesto almanaque, San Rulfo, Santa

Tecla, San Fermín, la Asunción, el caballo

relincha, el perro ladra, casi nadie le ofrece en

una esquina un pedacito suelto de bicicleta o

trompo, casi nunca es verano en pleno invierno

por razones de estricta pulimentada lógica,

hay que ser lo que se es o no ser nada, y nada

lo sacará de sus casillas, nadie lo sacará, y si un

caballo ladra no lo sabremos nunca, porque

los caballos no ladran. Bastaría un apenas, un no

quiero, para empezar de otra manera el día,

hervir la radio con las papas y a cada chico darle

un cocodrilo para que huela a miedo en las

escuelas, sacar los muertos a que tomen aire,

meter las mitras en la mayonesa, actividades

subversivas, claro, pero otras cosas hay; fusiles

corren por las picadas, Sudamérica crece en su

selva hacia la aurora, de tanto arroz bañado en

sangre nacerá otra manera de ser hombre.

No cito más que apenas estas cosas, saco de sus

casillas a unos cuantos que todavía creen en la

poesía encasillada en su vocabulario

lleno de compromisos con lo abstracto.

(La suma de los ángulos de un triángulo),

((Los caballos no ladran)),

(((Dice el doctor, y dice bien))).









21 junio, 2012

El hombre elefante

















































"Es cierto que mi forma es muy extraña,
pero culparme por ello es culpar a Dios;
si yo pudiese crearme a mí mismo de nuevo
me haría de modo que te gustase a ti.

Si yo fuera tan alto que pudiese alcanzar el polo
o abarcar el océano con mis brazos,
pediría que se me midiese por mi alma,
porque la verdadera medida del hombre es su mente."

Joseph Merrick (El hombre elefante)


20 junio, 2012

En el aire (La sociedad de la información) - CHOMSKY







Noam Chomsky  (10 estrategias de manipulación mediática)

1. La estrategia de la distracción
El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. «Mantener la atención del público distraída, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales (cita del texto “Armas silenciosas para guerras tranquilas”)».

2. Crear problemas y después ofrecer soluciones
Este método también es llamado «problema-reacción-solución». Se crea un problema, una «situación» prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.

3. La estrategia de la gradualidad
Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez.

4. La estrategia de diferir
Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como «dolorosa y necesaria», obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que «todo irá mejorar mañana» y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.

5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad
La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discursos, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. ¿Por qué? «Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad (ver “Armas silenciosas para guerras tranquilas”)».

6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión
Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido crítico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…

7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad
Hacer que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud. «La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles de alcanzar para las clases inferiores (ver “Armas silenciosas para guerras tranquilas”)».

8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad
Promover al público a creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…

9. Reforzar la autoculpabilidad
Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, ¡no hay revolución!

10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen
En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídos y utilizados por las elites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el «sistema» ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos.







19 junio, 2012

El sonido de la bicicleta





Ayer me porté mal con el cosmos./ Viví todo el día
sin preguntar por nada,/ sin sorprenderme de
nada./ Realicé acciones cotidianas/ como si fuera lo
único que tenía que hacer.






18 junio, 2012

Ajedrez

Alexandre Ravsk

Alexander Poklad

Ajedrez  (sin  título)

Agaphya Belaja

Agaphya Belaja 

Alexia Sinclair

Ajedrez  (sin  título)

Michael Cheval 

Ajedrez  (sin  título)

Adamska

Adrian Borda

Juta & Mareks

Andea Martins de Barros

Govert Muijs

Adam Lude Döring

Georgy Kurasov

Joanne Taylor

Anderson, Stanley

Terry Bradley

Julian Wasser  (Marcel Duchamp)

Peter Blake

Michael Parkes

Vassily Kandinsky

Ajedrez  (sin  título)

Victor Molev

Kaveh H. Steppenwolf


























Anna Silivonchik






“Una vez terminado el juego, el rey y el peón vuelven a la misma caja.
(Proverbio italiano)